El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, prometió que su país "va a mojarse por la paz" en la región, durante su breve visita a la ciudad cisjordana de Ramala, en la que se encontró con el presidente palestino, Mahmud Abbas.
Durante la presidencia de turno de la Unión Europea (UE), que España ocupará el primer semestre de 2010, "aceleraremos los pasos para que pronto tengamos el reconocimiento del Estado Palestino", apuntó el líder socialista. Zapatero destacó por ello los aspectos positivos de cara a las negociaciones: Habló de unos meses de relativa calma, una administración estadounidense, liderada por Barak Obama, decidida a lograr la paz y muchos países de dentro y fuera de Cercano Oriente apoyando los esfuerzos.
El presidente del Ejecutivo español consideró que, pese a la negativa de Israel a frenar el crecimiento de las colonias, ese país "tiene voluntad" por alcanzar la paz.
Zapatero llegó a la Muqata, la sede de la Autoridad Nacional Palestina en Ramala, a primera hora de la tarde y procedente de Jerusalén. Fue recibido con honores por el presidente Abas, el primer ministro Salam Fayad y otros representantes políticos palestinos. En la primera visita del presidente del gobierno español a tierras palestinas, Abas quiso destacar "la relación histórica y estrecha que une a ambos pueblos" tras condecorarlo con una estrella de honor en reconocimiento al apoyo recibido.
Zapatero, acompañado del ministro de Exteriores Miguel Angel Moratinos y otros miembros de su equipo, tuvo también palabras de elogio para el presidente palestino, a quien caracterizó por su "responsabilidad, sensatez y equilibrio" y sus esfuerzos por lograr la mejora de las condiciones del pueblo palestino.
Durante su entrevista con el primer ministro Benjamín Netanyahu, insistió Netanyahu en el derecho a la autodefensa y dejó claro que, para su país, la paz supone promover "un Estado palestino desarmado que reconozca al Estado de Israel". El primer ministro israelí aprovechó la ocasión para instar a los países de la ONU a que hoy, en el Consejo de Derechos Humanos, voten en contra del informe Goldstone. A su juicio, si ese informe avanza afectará al proceso de paz. El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, provenía de Jerusalén, donde se reunió con las autoridades israelíes y aseguró ayer en Israel que el pueblo español será siempre un "baluarte", un "militante activo" en defensa de la paz "justa" en Oriente Medio, "con dos estados que se respeten" y con la seguridad garantizada para los israelíes.
"Sabed que España es un país decidido a emplearse y entregarse en favor de la paz en esta región", subrayó Zapatero, quien recordó la Conferencia que acogió Madrid en 2001.
El presidente del Gobierno, que se mostró "conmovido" por la visita al Museo del Holocausto que realizó antes de reunirse con Peres, quien le recriminó que se llevara a Moratinos como ministro de Asunto Exteriores en lugar de dejarlo como mediador de la UE en la zona.
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